El oficialismo aprobó ayer el proyecto de ordenanza que eleva la tarifa a $6,86. La iniciativa tendrá que ser votada dentro de dos semanas por el plenario del Concejo para entrar en vigencia.
La comisión de Legislación le dio ayer despacho favorable al aumento del boleto, lo que posibilitará que el expediente sea tratado en la próxima sesión plenaria del Concejo Deliberante, prevista para el próximo jueves 14.
La medida fue aprobada con el voto favorable del interbloque de Cambiemos, compuesto por la Agrupación Atlántica y la Unión Cívica Radical, y el rechazo del Frente Renovador, el Frente para la Victoria y Acción Marplatense. A la reunión asistieron el secretario de Gobierno, Alejandro Vicente y el director de Transporte, Claudio Cambareri, quienes rechazaron las críticas de la oposición con respecto a la forma en la cual el Departamento Ejecutivo determinó el valor de la nueva tarifa, de $6,86.
Además hubo algunos concejales que cuestionaron la “contradictoria” actitud del oficialismo durante el debate haciendo hincapié en las declaraciones del intendente Carlos Arroyo, quien semanas atrás había rechazado la presión de los transportistas para lograr una rápida suba del boleto, a pesar de lo cual, su bancada apresuró el tratamiento del proyecto. La reunión de la comisión se desarrolló ante la presencia de integrantes del Polo Obrero y de la organización Votamos Luchar, quienes desde la barra del recinto rechazaron de manera vehemente los argumentos a favor del aumento, en especial, los esgrimidos por Vicente y Cambareri.
El oficialismo respaldó su postura defendiendo el estudio técnico, por el cual el Ejecutivo determinó que la tarifa debería subir un 16,27%, modificando su valor desde los actuales $5,90 a $6,86. Por su parte la oposición puso en duda el rigor con el cual fueron elaborados esos cálculos y advirtió sobre la posibilidad de que en un futuro no muy lejano los transportistas reclamen un nuevo aumento. El concejal del Frente Renovador, Alejandro Carrancio, señaló que los estudios técnicos contemplaron, por ejemplo, que las empresas poseen 300 bocas de recargas de tarjetas o que cuentan con 60 unidades equipadas con rampas para discapacitados cuando en realidad ninguna de ambas condiciones se cumplen.
“Esos son costos que los empresarios no están afrontando porque todos sabemos que los puestos de recarga existentes son muchos menos que los exigidos y que no todas las rampas para discapacitados funcionan de manera correcta”, advirtió.
Si bien el Concejo Deliberante recién tiene previsto volver a sesionar el próximo jueves 14, no se descarta que en el caso de existir presiones para que al aumento se aplicado con anterioridad a esa fecha el oficialismo convoque a una sesión extraordinaria.